Equipos de académicos de la Universidad de Chile investigan temas críticos para el futuro de la educación en nuestro país
Investigaciones sobre políticas educativas realizadas en el Campus Juan Gómez Millas se presentaron en el segundo Seminario organizado por la Red de investigadores en educación.
Diversos académicos y académicas de la Universidad de Chile están realizando investigaciones en temas clave para la Educación en Chile como el financiamiento de las escuelas públicas, la cultura escolar, el SIMCE y las bases curriculares de la educación básica.
Durante el segundo seminario de la Red de Investigadores en Educación del Campus Juan Gómez Millas, realizado a fines de marzo, se presentaron los análisis y principales resultados de estos estudios.
La investigación “Cultura escolar y recontextualización de la política educativa. Estudio etnográfico longitudinal” (FACSO) de Jenny Assael, Eduardo Santa Cruz, Paulina Contreras, Felipe Acuña, Benjamin Pujadas y Barbara Campill tiene como objetivos caracterizar las prácticas cotidianas de trabajo de directivos, docentes, profesionales de apoyo y asesores; y comprender las significaciones que directivos, docentes, profesionales de apoyo y asesores externos construyen en relación a la implementación de la política de accountability en el marco de la Ley de Subvención Escolar Preferencial SEP.
La pregunta que orienta la investigación es: ¿Qué transformaciones en la cultura escolar de escuelasemergentes y/o en recuperación está generando la implementación de la ley SEP?
Señalan los investigadores que “mejorar la calidad y equidad de los aprendizajes de los estudiantes chilenos ha sido la principal preocupación de las políticas educativas de las últimas dos décadas. La ley de Subvención Escolar Preferencial (SEP), promulgada en 2008, se enmarca en este objetivo estableciendo la entrega de mayores recursos, vía subvención por alumno, a aquellas escuelas que atienden al tercio más pobre de los estudiantes chilenos, denominados alumnos prioritarios. Para ello, exige a las escuelas elaborar e implementar un Plan de Mejoramiento Educativo, cuyo éxito es evaluado mediante el rendimiento en SIMCE.
Además, clasifica a las escuelas en autónomas, emergentes o en recuperación según estos resultados. Estas dos últimas categorías, implican la elaboración de un plan de mejoramiento detallado; y en el caso de las escuelas en recuperación, dicho plan posee mayores exigencias y la obligación de trabajar con apoyo externo. Además, de no mejorar sus resultados al cabo de cuatro años, las escuelas de esta categoría podrían ser cerradas”.
El equipo se ha propuesto investigar e intentar comprender los procesos de transformación de la cultura escolar en el marco de la implementación de la SEP, especialmente en aquellas escuelas en recuperación y emergentes, pues estarían recibiendo más apoyo y presión para cambiar, lo que es propio de las políticas de accountability del último tiempo.
Cuánto cuesta financiar el ejercicio del derecho a la educación
La segunda investigación, “Metodología participativa para costear el derecho a la educación”de Rodrigo Sánchez, Juan González, Diego Parra y Jesús Redondo (FACSO), señala que si la educación es un derecho humano fundamental y que, por lo tanto, el Estado debe garantizar su ejercicio igualitario para todos y todas, es necesario estudiar las condiciones para que este ejercicio se haga efectivo para todos los ciudadanos.
“Una de dichas condiciones es el adecuado financiamiento del sistema educativo, especialmente en los niveles de educación obligatoria. La precariedad de recursos que deben administrar los municipios, la competencia desleal frente a los establecimientos particular-subvencionados, el propio mecanismo de subvenciones y el financiamiento compartido, han producido, entre otras consecuencias, un sistema altamente segregado por clases sociales, generando una educación para ricos, otra para la clase media y otra para los pobres”.
Para los investigadores, la manera de financiar la educación no resulta indiferente.” Cuánto se destina a ella, tampoco. Estas decisiones requieren posicionarse a favor de una determinada concepción de la educación para así definir una postura frente al problema del financiamiento”.
Los investigadores se abocaron a construir una propuesta para saber cuánto cuesta financiar el ejercicio del derecho a la educación. Se recogió la experiencia de países latinoamericanos como Perú, Argentina y Brasil.
Los primeros resultados indican que los colegios necesitan el doble de la subvención actual. Por otra parte hay comunas que han perdido escuelas públicas y que tienen mayores matrículas en el sistema subvencionado. En Alto Hospicio, por ejemplo, la matrícula municipal es del 3,4%.
El estudio cuenta con la participación de instituciones como la Fundación SOL, el Programa de Educación y Psicología de la Universidad de Chile, y el apoyo de UNESCO.
¿El SIMCE es una evaluación válida?
La académica del Departamento de Estudios Pedagógicos DEP y coordinadora de investigación Teresa Flórez, presentó el estudio “Análisis crítico de la validez del sistema de medición de la calidad de la educación (SIMCE)”.
De acuerdo a Flórez, “a más de 20 años de su instauración, la ausencia de estudios sistemáticos sobre SIMCE resulta sorprendente si se observa la multiplicidad de propósitos y usos asignados a la prueba a través del tiempo (Bellei, 2002); las consecuencias no deseadas que se le reconocen (Comisión SIMCE, 2003); y la histórica falta de transparencia acerca de su proceso de construcción, todos puntos que debieran hacer urgente la pregunta por la validez de este sistema de evaluación”.
El estudio de la académica busca responder la pregunta: ¿Es el SIMCE una evaluación válida, considerando las diferentes dimensiones del concepto de validez?
Su objetivo central es analizar la validez del Sistema de Medición de la Calidad de la Educación (SIMCE), considerando el concepto unitario de validez, así como el enfoque de validez basado en argumentos, tomando en cuenta las diferentes dimensiones de este concepto (validez de constructo, contenido, criterio y consecuencial).
A través de entrevistas a actores involucrados en los procesos de elaboración, implementación, corrección y uso del SIMCE, y del análisis de las preguntas y orientaciones publicadas por el SIMCE, se explora, describe y analiza críticamente la validez de las interpretaciones que se realizan en base a los resultados de este proceso de evaluación.
“El SIMCE tiene dos macro propósitos en tensión: rendición de cuentas y apoyo a las prácticas pedagógicas, lo que es difícil resolver con un mismo instrumento”, explica Flórez.
Bases curriculares para la Educación Básica
La investigación “Las nuevas Bases Curriculares para la Educación Básica: ¿continuidad, reorientación, rupturas? Un análisis de sus supuestos ideológicos, políticos, culturales y pedagógicos” de Abraham Magendzo, Luis Osandon, Mirtha Abraham, Blanca Astorga, Fabian Cabaluz y Sonia Lavín, nace de la preocupación por las características subyacentes a la creación de una nueva normativa curricular, conocida como Bases Curriculares de la Educación Básica, el año 2012.
Durante abril se realizará el tercer seminario de la Red de Investigadores en Educación del Campus Juan Gómez Millas, impulsada en el marco de la Semana de las Pedagogías de Universidad de Chile.
En enero se inició un ciclo de seminarios y el primer tema que se abordó fue “Educación y política”.